Todos atrás y Dios de 9

En el programa del 26 de Junio, nos tomamos el atrevimiento de hablar de Dios..
Todos cuentan la historia de cómo Dios creó al hombre. Aunque lo correcto sería preguntarse cómo el hombre ha inventado a Dios. Es evidente que este invento es útil; de lo contrario no habría perdurado tanto. Hace milenios, Dios era todo lo desconocido: los astros (dios del Sol, de la Luna, etc.), las fuerzas de la naturaleza (dios del mar, del viento, del fuego, etc.), los misterios del hombre (dios de la fertilidad, del amor, etc.). Las ciencias han ido destruyendo esos dioses uno por uno. El único que subsiste es el Dios que explica la vida, nuestro misterio mayor. Si la ciencia descubriera algún día cuál es el origen de la vida, cómo se produce ese fenómeno casi milagroso, ése sería el último día de existencia de eso que llamamos Dios.

Dios tal como lo entendemos, es una creación ideológica judeocristiana. El monoteísmo supone una simplificación extrema de las antiguas religiones humanas, que adoraban a varios dioses, ninguno de ellos con los atributos de este Dios construido por Occidente. Desde luego, es una fábula que sirve para llenar el inmenso agujero negro de nuestra ignorancia, cuyo porvenir es venturoso e ilimitado.
Hay quienes dicen seguir una tradición familiar; otros, ser devotos de la Virgen o de un santo. En la última década, la Iglesia Católica perdió cerca del 10% de sus fieles (o clientes). A pesar de todo sigue vigente una doctrina nacida hace más de 2000 años. Según las estadísticas, no muy actualizadas por cierto, los que se dicen católicos serían ahora cerca de un 80% de la población total, un 10% menos que hace una década.

Con las religiones se cae en el ritualismo, en el moralismo y, con esto, la fe en Cristo salvador queda reducida a ciertas “reglas y comportamientos morales”.
Nuestras mentes funcionan encontrando significados profundos a situaciones y experiencias donde no las hay. En este sentido, los ateos tienen que esforzarse en serlo: la mente hace más sencillo creer que no creer.
El concepto de Dios nace de la transformación de los elementos naturales en "explicaciones", para poder saber, en su afán de búsqueda el hombre, ser "indefenso", frente al medio ha encontrado un método para lograr satisfacer sus ansias de conocimiento mediante mitología y divinidad.
La idea de Dios suele ir entremezclada con la definición de verdad, en la que Dios es la suma de todas las verdades. Desde esta perspectiva, la ciencia es sólo un medio de encontrar a Dios.

El agnóstico suele separar las posturas religiosas entre "conocer" y "creer". De esta forma una persona religiosa se distingue de un ateo por el hecho de que el religioso "cree" y el ateo "no cree". El agnóstico se separa de estas posturas indicando que unos y otros (religiosos y ateos) afirman un nivel de conocimiento sobre la realidad superior que el agnóstico no comparte.
La intolerancia religiosa estaba tratando de impedir los descubrimientos científicos que parecían chocar contra una lectura literal de la Biblia y otras doctrinas cristianas establecidas.Un dogma es una doctrina sostenida por una religión u otra organización de autoridad que no admite réplica y es proclamada verdad indiscutible.

Si tomamos a Marx y Nietzche,
KARL MARX: Presenta tres etapas:
1. Separación Iglesia-Estado: reduce la religión al ámbito de lo privado.
2. La Religión en un sueño de las necesidades humanas no satisfechas.
3. Materialismo histórico: El obrero se aliena en la medida en que es despojado del objeto de su trabajo. Por eso necesita la religión. Pero ésta es el opio del pueblo. La Religión desaparece en cuanto el obrero se identifica con su trabajo.
NIETZSCHE: Gran propagador del nihilismo: muerte de Dios. La moral cristiana es un sistema de prohibiciones, negaciones y frustaciones. Le horroriza el amor al prójimo y la igualdad entre los hombres. Los valores se fundan en la exaltación de la vida a la que se llega por la voluntad de poder para crear el super-hombre (dominio del más fuerte). De estas fuentes beberá Hitler...

Como dice Savater, en ocasiones la religión puede haber sido el opio de los pueblos, en el sentido de haber adormecido espíritus revolucionarios, pero en otros casos la religión parece más bien ser la cocaína de los pueblos. Hay casos en los que por religión la gente se pone agresiva, violenta y comete atrocidades; hoy estamos volviendo a la religión como un elemento de estimulación incluso del terrorismo.

La religión es una droga dura..